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SUEUM

MANIFIESTO

24 de enero de 2019

A los valientes y combativos miembros del SUEUM
A la Comunidad Universitaria
Al Pueblo en General

 

Hasta el último momento de su rectorado, Medardo Serna actuó con la cobarde alevosía que le caracterizó siempre, firmando un convenio con la federación a cambio de la obtención de 500 mdp., estableciendo los compromisos que él nunca pudo solventar durante su administración.
Serna González, antes de abandonar la rectoría se aventuró a firmar el compromiso de realizar una reforma a la Ley Orgánica de la Universidad Michoacana; precisamente la misma reforma que no se pudo concretar por la falta de capacidad y el estilo pusilánime del ex rector para enfrentar la problemática universitaria.
Los compromisos adquiridos por Medardo refieren también la modificación de los Contratos Colectivos de Trabajo, celebrados con el SUEUM y el SPUM, en lo que respecta al régimen de jubilaciones y pensiones; aspecto que no solo depende de la autoridad, sino de los propios sindicatos, que son los administradores de tales documentos legales, protegidos por la Ley Federal del Trabajo y cuyos derechos plasmados tienen el carácter de irrenunciables.
Si lo que se busca es la viabilidad financiera de la UMSNH, se debe de atender rigurosamente el tema de la transparencia, atendiendo al discurso del presidente Obrador, que plantea que la corrupción es el daño principal de la nación; si se pretende optimizar los recursos financieros, la nueva administración debe empezar por atender de forma detallada el asunto de cientos de trabajadores de confianza que fueron contratados de manera irregular por Medardo Serna, violentando el CCT del SUEUM, constituyendo un pesado lastre financiero para la institución educativa.
Una reforma integral es viable, siempre y cuando se promueva en ella la transparencia y la rendición de cuentas, la democratización de las elecciones universitarias, la extinción de la Comisión de Rectoría, pero sobre todo la reducción del robusto organigrama, plagado de funcionarios que se llevan enormes tajadas del presupuesto nicolaita, a cambio de funciones ambiguas que en nada favorecen a la Universidad.
Es posible platicar sobre el tema de jubilaciones y pensiones; pero antes debe demostrarse a toda la comunidad el verdadero origen de la crisis financiera. Los sindicalistas no somos responsables de los malos manejos cometidos por la autoridad y no podemos entregar nuestro legado sin una muestra contundente del desorden financiero provocado por Medardo Serna y su falaz austeridad.
Si la reforma es para acceder a un presupuesto suficiente y oportuno, valdría la pena reflexionar ¿Cuánto costaron las estancias frecuentes de Medardo y su comitiva en la Ciudad de México?, ¿Porqué no se exigió el concepto de la gratuidad educativa?, ¿Dónde están los millones de pesos generados por los onerosos documentos emitidos por la institución?


¡HASTA LA VICTORIA SIEMPRE!
¡UNIVERSIDAD O MUERTE!
COMBATIVAMENTE
“Cuna de mujeres y hombres valientes, crisol de libre pensamiento”
SINDICATO ÚNICO DE EMPLEADOS DE LA UNIVERSIDAD MICHOACANA