SUEUM

MANIFIESTO

7 de diciembre de 2018

A los valientes y combativos miembros del SUEUM
A la Comunidad Universitaria
Al Pueblo en General

Un líder es aquella persona que encabeza un movimiento social, político o de cualquier índole. En el SUEUM, tenemos la gran fortuna de contar con esta figura emblemática, representada por Eduardo Tena Flores, un dirigente de temple con las facultades de personalidad adecuadas para transmitir el sentido de lucha que requiere nuestro sindicato; pero además con la formación y la experiencia idóneas para caminar de frente en estos momentos tan complicados para los trabajadores del sector educativo.
Un líder autentico está dotado de factores hegemónicos, porque tiende a ser seguido y arropado por su base. La verdadera fuerza de nuestro sindicato tiene que nutrirse diariamente con el fortalecimiento del liderazgo y de las decisiones tomadas con inteligencia, porque de ello depende la delgada línea que divide el triunfo o la derrota.
Somos un sindicato acostumbrado a la victoria, aun en los momentos de mayor adversidad; pero no debemos olvidar nuestra convicción de lucha incesante, porque claudicar es igual a sucumbir ante los adversarios de clase. El oficio político de Tena Flores marca la gran diferencia frente a las autoridades, demostrando con argumentos irrefutables los derechos violentados de los trabajadores; sin embargo, la tarea es complicada y nos corresponde a todos los sindicalistas el resguardo celoso de nuestras trincheras respectivas.
La lucha sindical nunca termina y debemos estar mentalizados para asumir la responsabilidad social que tenemos con la Universidad, con el sindicato, pero sobre todo con nuestras familias. Un sindicato desmovilizado está condenado a la extinción. Los enemigos de la institución están plenamente identificados y debemos expresar la inconformidad con todos los elementos políticos y legales, pero sobre todo, asumiendo con responsabilidad los roles correspondientes de libre manifestación.
Eduardo Tena Flores ha consagrado su vida al SUEUM, construyendo cada día un apostolado del sindicalismo y nuestra obligación consiste en el acompañamiento combativo en defensa del patrimonio laboral que nos legaron los viejos jubilados.
Nadie nos dijo que la lucha sindical sería fácil, pero las recompensas gratificarán el sacrificio de la valentía. Debemos demostrar con dignidad y orgullo la fortaleza de un sindicato invicto en la batalla, asumiendo con entereza las decisiones colectivas para fortalecer aún más el liderazgo que tenemos, porque su fuerza simboliza la fuerza de todos los trabajadores universitarios.

¡HASTA LA VICTORIA SIEMPRE!
¡VIVA ETERNAMENTE EL SUEUM!
FRATERNALMENTE
SINDICATO ÚNICO DE EMPLEADOS DE LA UNIVERSIDAD MICHOACANA
“Cuna de mujeres y hombres valientes, crisol de libre pensamiento”