SUEUM
MANIFIESTO
6 de abril de 2017
A la Comunidad Universitaria
Al Pueblo Michoacano
Los hechos violentos ocurridos la tarde del 5 de abril, son un motivo de repudio e indignación, ante la intolerancia ante la libertad de manifestación ejercida por los comuneros de Arantepacua, perteneciente al municipio de Nahuatzen. Un gobierno que acribilla a sus comuneros indígenas está condenado al rechazo popular, porque es imposible avanzar si no se privilegian los canales de diálogo, antes que las medidas represoras del autoritarismo.
Generar violencia y terror en contra de nuestros indígenas es consumar un acto intransigente que atenta contra los derechos humanos de los mexicanos, pero sobre todo, contra la dignidad y la vida de los campesinos. No es posible que en un estado de derecho democrático, se sigan consumando este tipo de homicidios injustos y ruines, en contra de quienes demandan una causa legítima. Es inadmisible que el estado continúe consumando las viejas prácticas represoras de la barbarie mexicana.
Consumar un atentado en contra de la clase campesina es ofender nuestras raíces y nuestro origen nacional, representado orgullosamente por las comunidades rurales. Los homicidios y los actos de violencia perpetrados en contra de los comuneros indígenas de Arantepacua, no pueden quedar en la impunidad y el olvido; el Gobierno Michoacano debe asumir una actitud severa y separar de manera inmediata a los responsables de la sangre derramada de nuestros hermanos campesinos. Los michoacanos exigimos que se esclarezcan los sucesos para que caiga todo el peso de la ley en contra de los cobardes homicidas.
Es inaceptable continuar en medio de una terrible descomposición del tejido social, sin argumentos convincentes que justifiquen la intolerancia y la violencia extrema, en contra de quienes levantan la voz, en demanda de una causa justa. Tolerar la represión brutal de las fuerzas policiales, sería asumir la conformidad ante las injusticias cometidas. No es posible asumir el simple rol de espectadores cuando de atenta contra la vida de nuestros hermanos, masacrando a quienes levantan la voz ante el despojo territorial, el cacicazgo y las arbitrariedades consumadas contra quienes menos tienen.
Repudiamos categóricamente las acciones criminales consumadas por el Grupo de Operaciones Especiales, la Policía Federal, la Policía Michoacán, la Policía Ministerial y todos los responsables directos de este suceso vergonzoso que ha teñido de sangre el glorioso campo michoacano.
¡Basta ya de represión y asesinatos!
¡Basta ya de impunidad!
¡Basta ya de terror!
¡Hasta la victoria siempre!
¡Viva el SUEUM!