Por: Alejandro Meza


El SUEUM tiene la necesidad de reunirse con Medardo Serna para restablecer las pláticas referentes a las clausulas violentadas al Contrato Colectivo de Trabajo; pero no debe interpretarse como un favor del rector a nuestro gremio, sino como la obligación que este tiene en calidad de representante legal de la Universidad Michoacana, conforme a lo estipulado en la Ley Orgánica y en la Constitución de los Estados Unidos Mexicanos.
Las mesas de trabajo deben reanudarse a la brevedad a fin de evitar un conflicto de huelga que lesionaría los intereses del alumnado universitario y las “funciones sustantivas” de la institución de las que tanto se preocupa el mandatario nicolaita. No estamos rogando reunirnos, estamos exhortando a la autoridad a que ejerza las funciones conferidas, a fin de destrabar un problema complicado que se ha agudizado por falta de voluntad de parte de las autoridades universitarias, que han ignorado mañosamente la reparación de nuestros derechos salariales, argumentando “supuestas violaciones”, con evidentes omisiones de negligente proceder.
Los sindicalistas estamos dispuestos a entablar el diálogo en un marco de cordialidad y respeto, pero exigimos reciprocidad de parte de la rectoría, a la que le recordamos que el respeto se adquiere como resultado de la buena voluntad; no solamente agrede la palabrería altisonante, la transgresión de los derechos también insulta la dignidad de los trabajadores.
Sin embargo, debemos reunirnos con el rector, pese a las diferencias ideológicas, porque en la lucha de clases es necesario escuchar la voz del adversario a fin de solventar la problemática, logrando acuerdos que conlleven a la buena comunión de las partes involucradas. Ni siquiera nos agrada la presencia de un rector con quien tenemos una relación polarizada, propiciada por la necedad y la obsesiva fobia contra sindical; pero nuestro objetivo es concreto, no buscamos la empatía ni la amistad de Medardo Serna, exigimos la reparación de todas y cada una de las cláusulas violentadas al Contrato Colectivo de Trabajo y solamente por la vía del diálogo podremos avanzar en ese sentido.
El SUEUM es un sindicato valiente, respaldado por 79 años de lucha y de conquistas. Nuestra dignidad está forjada en la historia y el compromiso de los verdaderos sindicalistas. Exigimos el respeto que merecemos, porque somos respetuosos de la institución y de la investidura, pero no nos arrodillamos ante nadie porque tenemos la obligación de defender lo que nos pertenece.

¡Universidad o Muerte!
¡Viva eternamente el SUEUM!