La represión que sufrieron los estudiantes de la Cd. de México el 2 de octubre de 1968 por parte del gobierno Federal encabezado por Diaz Ordaz y Luis Echeverria Alvarez.
La represión no se da solo con armas sino con echos y palabras, acuerdos no cumplidos, intolerancia, nepotismo, y agresión por imposición para las personas y sus familias, este tipo de agresiones son las que hemos sufrido los trabajadores Universitarios por parte de sus funcionarios, agresiones que han lastimado no solo a los trabajadores sino a sus familias, agresiones que han sufrido maestros y estudiantes, intolerancia y falta de sensibilidad buscando un solo fin ADUEÑARSE DE LA UNIVERSIDAD.
Claro esta que usando a diversos medios de comunicación (UNIVERSITAS), organizaciones (STUMICH) y personas (Armando Rangel) buscan confrontar a los trabajadores ya sea administrativos, manuales o profesores para desaparecer lo que se ha ganado a través de los años, que ha costado sangre, sacrificio, lucha de muchas personas que lograron nuestros Contratos Colectivos de Trabajo.
Reformar las pensiones y jubilaciones no salva a la Universidad de las crisis en que esta sumida, crisis que por cierto no fue ocasionada por la comunidad universitaria, sino por el rector actual y los dos rectores anteriores, crisis por sus gastos excesivos, compra de flotillas de autos para sus funcionarios, comidas, negocios propios, pago de favores.
El quedarse callado es aceptar y estar de acuerdo con la dictadura ejercida desde hace años en la Universidad, es permitir que dañen nuestro patrimonio y el de nuestra familia, es permitir que dañen nuestra dignidad, es no defender la salud de nuestra familia.
La única forma de luchar contra estas personas es defender nuestros derechos, defenderos con la justicia, dignidad, pero sobre todo defendernos con la razón, sin permitir intimidaciones, agresiones y mentiras.
El rector y su cartel fueron impuestos para desestabilizar a la Universidad, y lograr con ellos la desaparición de los CCT, la gratuidad en la educación, evitar la rendición de cuentas y su enriquecimiento ilicito.
Si me alzan la voz, yo gritare, si me agreden es agredir a mi familia, y yo por mi familia doy mi vida, si me mienten no lo aceptare, si el 2 de octubre no se olvida, yo no olvido el daño que me ha echo el rector y sus funcionarios a mi y a mi familia.
Miguel Angel Lopez.