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SUEUM

MANIFIESTO

05 de enero de 2018

 

A LA OPINIÓN PÚBLICA


Los Comités Ejecutivos del Sindicato Único de Empleados de la Universidad Michoacana (SUEUM) y del Sindicato de Profesores de la Universidad Michoacana (SPUM), respectivamente han decidido rechazar categóricamente la propuesta del Rector Medardo Serna González, para reunirse en mesas de trabajo con el propósito de analizar la situación financiera universitaria. Sería un acto de incongruencia de los sindicalizados reunirse con las autoridades universitarias, cuando los adeudos de nuestros aguinaldos y otras prestaciones continúan sin ser pagadas, causando con ello un daño a más de siete mil trabajadores administrativos y académicos.


Desde hace varios meses los sindicatos titulares, SUEUM y SPUM, hemos desconocido la figura de Medardo Serna como interlocutor de nuestros gremios y hemos pedido a la Comisión de Rectoría su inmediata remoción del cargo por causas graves planamente justificadas, inherentes al incumplimiento de sus obligaciones como rector y a la extralimitación de sus facultades en perjuicio de la comunidad nicolaita.
En todo momento, los sindicatos propietarios de los Contratos Colectivos de Trabajo, buscamos el acercamiento en mesas de diálogo que el rector evadió recurrentemente, faltando a la obligación que tiene como funcionario público.
Hoy Medardo Serna, pretende involucrar a los sindicalistas en el acompañamiento de una gestión de recursos que él no ha tenido la capacidad ni la solvencia moral para realizar, ante un oscuro panorama generado por su propia administración.
Nuestras familias han padecido en estas fechas festivas la insolvencia económica y el daño moral propiciado por la irresponsable falta de pagos salariales, violentando con ello un derecho consagrado en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y en la Ley Federal del Trabajo.
Resulta inviable aceptar la invitación de diálogo de Medardo Serna, en estos momentos sensibles en los que se ha trastocado el derecho y la dignidad de los trabajadores; lesionando el sustento familiar y el estado emocional de hombres y mujeres que repudian la figura del rector, por todo el daño ocasionado a lo largo de su mandato.
Hemos invertido el periodo vacacional, transformándolo en jornadas de lucha en defensa de nuestros salarios y aguinaldos y estamos convencidos de que la gestión de recursos para saldar tales compromisos de la autoridad, vendrá como resultado de la movilización organizada de los sindicatos y no como producto de la instauración de mesas de trabajo con quien permanentemente ha dado muestras de ser un adversario, cuyo ostracismo recurrente, ha pretendido engañar una vez más a la sociedad, simulando trabajar en armonía, cuando la realidad dista mucho del mensaje promovido por Medardo.


Sería un acto de incongruencia reunirnos con Serna González, en estos momentos en que su deplorable investidura se encuentra desconocida por los gremios sindicales titulares. No puede existir reunión alguna del SUEUM y del SPUM con las autoridades universitarias, porque nos ha golpeado en nuestro derecho, ha pretendido dividirnos mediante intrigas falaces y compra de conciencias promoviendo, así, la desarticulación del sindicalismo nicolaita.
No puede asistirse a un diálogo serio con quien no tiene conciencia de la realidad por la que transitamos los universitarios. Superar la crisis del centenario nicolaita requiere, de inicio, no extraviar el sentido común frente a la problemática que padecemos. Los retos que enfrentamos los nicolaitas demandan un interlocutor válido, serio y digno de confianza. La incapacidad, la irresponsabilidad y la indolencia no nos conducirán a buen puerto.


La invitación de Medardo Serna dirigida a los sindicatos llega tarde y con un acompañamiento de mentiras sobre la realidad por la que atraviesa la Casa de Hidalgo. Constituye un acto de cinismo y descaro, carente de principios morales, que más que acercar a los gremios a la concordia, busca la legitimación de una administración catastrófica que nada tiene que hacer al frente de nuestra querida Universidad.
Puntualizar, finalmente, que la responsabilidad de la crisis por la que transita actualmente la Universidad Michoacana recae en Medardo Serna González. Ni los académicos ni los empleados ni los estudiantes universitarios somos los culpables de la actual administración irresponsable, opaca e incongruente que no ha estado a la altura de las circunstancias ni de las exigencias de la Benemérita y Centenaria Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo.



Atentamente

Consejo General del Sindicato de Profesores de la Universidad Michoacana

Consejo General de Delegados de Sindicato Único de Empleados de la Universidad Michoacana